Una buena natilla con galleta es el remedio ideal para un buen domingo, y si la preparas en casa te llevará a esos recuerdos únicos de infancia.
Claro, puedes probar también otras versiones de natilla, como la de chocolate o fresa, pero esta receta te encantará, así que toma nota.
Lo que necesitas para la receta
- 750 mililitros de leche
- 100 gramos de azúcar
- 8 huevos
- 1 vaina de vainilla
- Galletas maría
- Canela en polvo
Prepara cremosa natilla con galleta y canela
De los 750 ml de leche, separa un vaso y pon el resto a calentar en una olla. Abre la vaina de vainilla, haciendo un corte transversal para que deje todo su aroma, y échala.
Luego, agrega el azúcar y cocina todo a fuego lento durante un par de minutos aproximadamente. Apaga el fuego, tapa la olla y deja reposar alrededor de 30 minutos.
Separa las claras de las yemas de los 8 huevos y bate estas últimas en un bol. Cuando estén totalmente batidas las yemas, añádeles el vaso de leche que habías reservado y mezcla bien.
A continuación, retira la vainilla de la leche que tienes en la olla y calienta otra vez.
Cuando empiece a tomar temperatura, agrega las yemas al mismo tiempo que bates suavemente para que se mezcle bien.
No pares de remover y ve cociendo a fuego muy bajo, sin dejar que hierva en ningún momento.
Cuando haya cogido cuerpo, en unos 3 o 4 minutos más o menos, retira del fuego y rellena los recipientes de natilla con galleta de la siguiente manera:
Coloca una galleta sobre cada recipiente y espolvorea una pizca de canela en polvo por encima.